Los gatos mega enormes transformarían nuestra convivencia con los felinos de forma radical. Imagina despertar cada mañana junto a un compañero que pesa 72 kilos, diez veces más que tu gatito actual. La vida cotidiana se convertiría en todo un desafío: desde alimentarlo con 1 kilo de comida diario hasta gestionar un arenero que podría ocupar una habitación completa. La economía familiar se vería seriamente afectada con un gasto aproximado de 430 euros mensuales solo en comida para tu MEGA Pupusito, sin contar otros gastos como el veterinario o los destrozos que podría causar.
Trasladar a tu compañero felino gigante al veterinario requeriría una furgoneta especial, y encontrar vivienda de alquiler que permitiera un animal de ese tamaño sería una misión casi imposible.
¿Y qué pasaría si tu gato gigante se cruza con el perro del vecino? Necesitarías un seguro especial para cubrir posibles daños.
Pero no todo serían inconvenientes: podrías montarte encima como si fuera un caballo, sus ronroneos serían como nanas amplificadas perfectas para dormir, y sería prácticamente imposible perderlo. Este capítulo off-topic sobre gatos mega enormes te hará reflexionar sobre lo afortunado que eres de tener un gato de tamaño normal, aunque la idea de un mega felino pueda parecer tentadora.
✨Recuerda que tienes el curso gratuito Entiende a tu gato en 7 días para que en una semana puedas detectar y comprender lo que necesita tu gato para vivir mejor, más tiempo y más feliz. Y que te puedes apuntar al mail semanal Felicicat para que cada Miércoles te explique un truco que a tu gato le hará muy feliz. Y suscribiéndote a los cursos serás capaz de cuidarlo como necesita.
Si quieres estar al día de todo lo que pasa entra en el canal de Telegram
Aquí te dejo los puntos clave del capítulo de hoy:
¡Hola! ¡No puedes ver este contenido porque no estás registrad@ aún!
Te puedes registrar desde aquí y acceder a todo el contenido
Después de conocer todos los detalles sobre cómo sería vivir con gatos mega enormes, seguramente has quedado fascinado con este concepto tan peculiar. La realidad de mantener un felino de 72 kilos en casa presenta desafíos significativos que van desde lo económico hasta lo logístico.
El coste mensual de alimentación ascendería a unos 430 euros, una cantidad prohibitiva para muchos presupuestos familiares. El simple acto de cambiar el arenero se convertiría en una tarea hercúlea, requiriendo herramientas especiales y mucho espacio en casa. Los propietarios de un MEGAgato necesitarían transportes especiales para visitas veterinarias y enfrentarían grandes dificultades para encontrar viviendas que aceptaran a su mascota superdesarrollada.
Sin embargo, las ventajas también resultan fascinantes: los ronroneos amplificados serían una experiencia sonora única, los abrazos resultarían más intensos sin miedo a lastimar al felino, y podrías salir a correr con él aunque probablemente te dejaría atrás rápidamente. Este episodio nos invita a apreciar a nuestros gatos en su tamaño natural, reconociendo que aunque la idea de un Mega Pupusito resulta tentadora, las complicaciones prácticas lo hacen inviable para el día a día.
Los gatos mega enormes quedarán, por ahora, en el terreno de nuestra imaginación como una curiosa reflexión que nos hace valorar aún más a nuestros compañeros felinos de tamaño estándar.
Gracias por dejar 5 estrellas en Spotify y en Itunes y por estar aquí cada día! Y sobretodo por apuntarte a los cursos, que es lo que hace que el refugio para gatos Missipussiland sea sostenible y que pueda seguir ayudando a más gatos! 💙
¡Un abrazo, un toquecito de nariz y nos vemos en el siguiente capítulo!
¡Adiós!